El dirigente vecinal destacó que tras la protesta, autoridades policiales se reunieron con los vecinos para escuchar sus reclamos. "Estuvieron presentes el segundo jefe departamental y la titular de la comisaría séptima. Nos dijeron que hay limitaciones en recursos y personal, pero insistimos en la necesidad de un plan de prevención que incluya la presencia permanente de policías en las calles, no solo patrulleros que pasan de vez en cuando", explicó.

García resaltó la efectividad que tenía el sistema de policías caminando en las calles, implementado anteriormente. "Ese contacto cercano del policía con los vecinos generaba una mayor sensación de seguridad. Ahora, la falta de controles, especialmente en motos ilegales, fomenta el delito", añadió.

Un caso reciente expuesto por García muestra la gravedad de la situación: "Una joven fue asaltada a plena luz del día por un grupo de menores en moto. Esto no debería ocurrir en un barrio poblado y con cámaras de seguridad. Los vecinos están cansados de sentirse desprotegidos", denunció.

Finalmente, el referente vecinal subrayó que el objetivo no es solo combatir el delito, sino también prevenirlo. "Un plan integral de seguridad debe considerar no solo la vigilancia, sino también la marginalidad que lleva a muchos a delinquir. Si logramos atacar las raíces del problema, podemos evitar futuros delitos y mejorar la convivencia", concluyó.

La próxima concentración de vecinos está prevista para el sábado siguiente, y se espera una respuesta más concreta de las autoridades. "Lo que pedimos no es imposible: presencia policial, controles y un verdadero compromiso con la seguridad de los ciudadanos", enfatizó García.