El Indicador Barrial de Situación Nutricional (Ibsn), elaborado durante el cuarto trimestre de 2023, destaca que de los 1.665 menores relevados, un 22,5% presenta sobrepeso y un 23,2% obesidad. Además, el déficit por bajo peso afecta al 1,3%, y el riesgo de bajo peso al 2,3% de la población estudiada. Estos números son alarmantes y reflejan una situación que se agrava con la crisis socioeconómica.

Ana Laura Vulcano, integrante de la Mesa de Diálogo por la Dignidad de las Periferias, en diálogo con LU9, comentó sobre la situación en los comedores. "Los resultados indican que esta condición afecta mayormente a menores de 6 a 10 años, donde el 55,5% presenta malnutrición. En los adolescentes de 10 a 18 años, esa cifra se sitúa en el 50,6%", explicó Vulcano.

El informe también revela cifras preocupantes sobre la situación nutricional de los lactantes: el 41,1% de los menores de 0 a 2 años relevados se encuentran en alguna de las variantes de malnutrición. Las causas incluyen factores modificables durante el embarazo, como bajo o alto peso al nacer, ganancia de peso excesiva de la madre, diabetes gestacional y complementación temprana de la lactancia materna debido a la necesidad de las madres de trabajar en condiciones precarias.

Además, la desnutrición crónica, la falta de nutrientes necesarios durante años, impide un desarrollo acorde a la edad. El informe muestra que el 5,2% de los menores de 2 a 18 años presentan baja talla, y el 5,6% está en riesgo de desarrollarla. Vulcano subrayó que estos problemas crónicos y estructurales requieren atención urgente y prioritaria de las políticas públicas para garantizar el acceso a alimentos nutritivos y de calidad necesarios para un desarrollo saludable.