Villalba explicó que un cuarto de los hogares en Mar del Plata y Batán, más de 62 mil familias, no tienen acceso a la red de gas natural y dependen del gas envasado. "Desde que se eliminaron los precios máximos, las garrafas han aumentado significativamente, y existe una gran disparidad en los precios", señaló. Según el dirigente, en el barrio Monte Varela las garrafas se venden por 14 mil pesos, mientras que en Parque Hermoso el precio ha llegado a los 15 mil.

En este contexto, algunas familias optan por comprar directamente al repartidor, quien cobra 10 mil pesos por la garrafa más 3 mil por el envío. Villalba subrayó el caos que enfrentan estas familias debido a la incertidumbre sobre el precio del gas y la dificultad de los minoristas para reponer a un valor fijo. "Es un desorden más en medio de un contexto generalizado de desorden", agregó.

La falta de acceso a calefacción adecuada ha llevado a muchas familias a recurrir a métodos peligrosos, como el uso de leña, que puede provocar incendios. Villalba mencionó que, según informes recientes, se ha registrado un incendio por día debido a conexiones eléctricas precarias o métodos inseguros para calentar los hogares. "Algunos vecinos incluso recurren a recoger leña en el monte porque comprarla es demasiado caro", lamentó.

En medio de la recesión y la falta de trabajo, la situación es particularmente preocupante para las familias marplatenses que luchan por calefaccionarse durante el invierno.