"Hay una complicidad evidente. Las plataformas digitales no solo operan, sino que hacen publicidad libremente, lo que está prohibido por la ordenanza. Esto sucede porque quienes deberían controlar están favoreciendo a estas empresas, seguramente por algún tipo de beneficio económico", afirmó Cirone, apuntando directamente a una falta de voluntad política para hacer cumplir la ley.

Además, criticó las medidas que apuntan a flexibilizar los controles sobre el transporte, lo que considera una amenaza directa a la seguridad de los pasajeros. "Hace años, cuando hacíamos la inspección anual de los taxis, revisaban cada detalle del vehículo. Hoy ni siquiera miran el auto, lo que refleja claramente el intento de desregular todo el sistema", aseguró.

Cirone también subrayó el impacto económico que estas plataformas tienen sobre los trabajadores del transporte. "Las plataformas no arriesgan nada, mientras se llevan hasta el 30% de las ganancias. Los choferes, que ya están en una situación precaria, terminan destrozando sus vehículos por las tarifas bajas que imponen las plataformas", explicó.

En resumen, Donato Cirone denunció que la falta de control y la permisividad hacia las plataformas digitales están desprotegiendo tanto a los trabajadores del transporte como a los pasajeros. Según él, el problema no es solo local, sino parte de una tendencia más amplia de desregulación y liberalización del mercado que afecta a toda la industria del transporte.

Por ahora, el conflicto entre el sector tradicional de taxis y remises y las plataformas digitales sigue en aumento, mientras las autoridades continúan sin intervenir de manera efectiva.