El coordinador describió las condiciones de los hogares. "Uno de los dispositivos, destinado a adolescentes de 12 a 18 años, no tiene placares para que los chicos guarden sus pertenencias y el comedor ni siquiera tiene ventanas. Es inaceptable desde el inicio", señaló, advirtiendo que el municipio no ha respondido a los pedidos formales para declarar la emergencia en políticas de niñez.

Romay también expresó su indignación por la falta de soluciones para los adolescentes que cumplen 18 años y deben dejar los hogares: "El sistema literalmente les da una patada y los abandona. Sin herramientas, estos chicos quedan expuestos al riesgo de caer en situaciones extremas, como la calle o la delincuencia. Necesitamos un Estado presente, no solo para los chicos, sino también para sus familias", enfatizó.

Finalmente, Romay destacó la necesidad de un cambio estructural: "Si seguimos mirando para otro lado, perderemos más generaciones. La niñez no puede ser una cuestión de menor importancia. Estos chicos son el futuro, y debemos protegerlos como sociedad".