Ianantuony destacó el impacto social del tren, especialmente para estudiantes de su distrito: "Más de 2.500 jóvenes alvaradenses cursan carreras en la Universidad Nacional de Mar del Plata. Un tren seguro y económico sería clave para sostener sus trayectorias formativas. Por eso, como municipio, incluso hemos adquirido minibuses para garantizar el acceso al estudio", explicó.

Sin embargo, el intendente advirtió sobre los desafíos del proyecto, como la relocalización de asentamientos ubicados sobre el trazado ferroviario. "Es un tema que debe resolverse en conjunto con General Pueyrredon y con recursos nacionales. No se trata solo de voluntad política, sino de planificación urbana que contemple a todas las partes involucradas", señaló.

En cuanto a la sostenibilidad económica del tren, Ianantuony destacó la necesidad de incluir el transporte de carga como eje fundamental. "Unir los puertos de Mar del Plata y Quequén por tren potenciaría la producción agrícola y de valor agregado del sudeste bonaerense. Este tipo de integración regional es lo que hace viable el transporte de pasajeros", explicó.

Finalmente, Ianantuony instó a ampliar la mirada del proyecto más allá de lo local. "La propuesta debe considerar las necesidades de toda la región. No se trata solo de un paseo comercial o de una mirada marplatense, sino de un beneficio integral que conecte a los distritos y fortalezca el desarrollo económico y social de nuestra zona", concluyó.